De usar y tirar

De usar y tirar

Hace dos días un compañero de trabajo me preguntó si estos guantes de su mujer tenían arreglo.

– Hombre por tener…puedo volverlos funcionales pero perfectos no van a volver a ser.

– Bah sino déjalo que son de los chinos. Ya compraremos otros.

– Bueno, si no tienes prisa me los llevo y a ver qué puedo hacer…

Es que así son ahora las cosas, de usar y tirar. Y no sólo las cosas, las relaciones, las amistades, los trabajos… que básicamente cuando empiezan a tener algún desperfecto o ya » no nos hace felices » lo archivamos en la P de papelera 🗑️

Que esto de la gratificación instantánea es mucho mejor, claro, al menos es más fácil que decirle a tu pareja lo que te duele sin atacar y sin romperlo todo; a alguien que consideras tu hermana no te ha gustado su gesto y que te hace sentir mal o pedir una mejora laboral de lo que sientes que te limita en el trabajo…si, es mucho más duro.

Debo ser una retrógrada porque me he tirado usando la misma colonia quince años, hasta hace nada y una tacaña por tener ropa de mercadillo que me encanta. Pero lo cierto es que me hacen feliz, por qué cambiar algo que funciona?

Una de mis faldas favoritas la compré en un chino cuando vivía en Alcalá, y cada vez que me la pongo alguien me pregunta de dónde es. «Ah, pues no parece de mercadillo…» Y si, digo abiertamente que lo es. La hace más fea, acaso?

Merecería ser cosida igual que estos guantes 🧤

3 thoughts on “De usar y tirar

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